Cómo se estudia el insomnio:
El interrogatorio es fundamental. Es sumamente importante interrogar sobre:
- Tiempo de evolución del insomnio
- Hábitos en relación al sueño, diurnos y nocturnos (Agenda de sueño)
- Antecedentes médicos y comorbilidades (médicas y psiquiátricas)
- Consumo actual de medicación
- Consumo de sustancias estimulantes (Café, té, mate, bebidas cola, energizantes, etc)
- Condiciones y características de la habitación (presencia de TV, computadora, radio; oscuridad, temperatura, confort de la cama, etc).
- Síntomas emergentes al momento de acostarse o durante la noche.
- Evidencia de ronquidos, apneas y movimientos excesivos nocturnos.
Una entrevista psicológica semi-estructurada ó pautada, con un detallado interrogatorio es una de las herramientas más útiles. Es muy importante hacer un relevamiento de la rutina de sueño-vigilia, utilizar agendas de sueño e incorporar protocolos para detectar la mayor cantidad de determinantes del insomnio.
Las agendas de sueño sirven para registrar datos sobre la rutina de sueño/vigilia del paciente. Es importante que sean claros y simples, y se deben completar diariamente por 1-2 semanas. También existen diferentes cuestionarios que pueden ser de utilidad. (ver Apéndices).
Hoy en día, se puede optimizar el tiempo de consulta utilizando la Internet para responder los cuestionarios y completar las agendas. De esta manera, el paciente se involucra en el proceso diagnóstico.
- La polisomnografía (PSG) permite una evaluación completa de las variables fisiológicas durante el sueño. Permite ver la arquitectura del sueño, como también variables respiratorias y de movimiento. Es especialmente útil en el insomnio de mantenimiento. La poligrafía y actigrafía ocupan un espacio creciente, habilitando estudios en el domicilio del paciente.
- Existen otros estudios complementarios que también pueden ser de utilidad:
- EEG cuantificado o Mapeo cerebral: permite determinar perfiles de actividad eléctrica cerebral de frecuente asociación a estados de tipo ansioso o depresivo. Muchas veces el insomnio está relacionado a trastornos del ánimo.
- Test psicológico o neuro-cognitivo: podría ayudar a determinar el perfil emocional y de las funciones mentales superiores, factores que también influyen en el sueño.
- Laboratorio: útil para ver cambios con repercusión en el sueño