El sueño y el café:
La cafeína es un estimulante, lo que significa que puede producir un estado de alerta. Los productos con cafeína, como el café, té, bebidas cola y chocolates, permanecen en el cuerpo en promedio de 3 a 5 horas, pero pueden afectar a algunas personas hasta 12 horas después.
Aunque crea que la cafeína no le afecta, ésta puede estar interrumpiendo y cambiando la calidad de su sueño. Evitar la cafeína, teína y mateína, dentro de las 6-8 horas de irse a dormir puede ayudar a mejorar la calidad del sueño.
A mucha gente, tomar una taza de café le ayuda a sentirme mejor, más despejado, alerta, de mejor humor, etc.
El problema es cuando la cantidad diaria se excede y comienza a traer problemas.
Una taza son alrededor de 100 mgrs de cafeína. Hasta 2 ó 3 tazas por día, seguramente no habrá problemas.
Pero si Ud supera esa cantidad, es muy probable que comienza sentirse tenso, inquieto, con problemas para dormir, irritable, con cefalea, alteraciones digestivas, etc.
Por supuesto, la sensibilidad a la cafeína es variable, y existen personas que aún con una pequeña cantidad responden exageradamente. Aquellos a quienes les ocurre, deberán restringir más aún el uso del café.